viernes, 1 de enero de 2010

2nd Time in New York II


El día de Fin de Año amaneció nevando y con un frío de la leche. Parecía que si queríamos ir a Times Square íbamos a tener que pasar frío... y así fue.


Fuimos a devolver el GPS a las diez de la mañana, nos dedicamos a pasear por la zona del barrio de Flatiron District, fuimos a ver Times Square de día y estuvimos en la Saint Patrick’s Cathedral. Después de este paseo decidimos ir a dormir un poco al hotel antes de ponernos a esperar en Times Square a que llegase el Año Nuevo.



Llegamos a las 4:30pm y estuvimos esperando durante 7 horas y media bajo la lluvia, la nieve y el frío en un cuadrado habilitado por la policía y del cual no nos podíamos salir. Fue duro estar tanto tiempo allí de pie aguantando la meteorología que quería fastidiarnos un poco pero lo cierto es que estábamos bastante bien situados y una espera de 8 horas no nos iba a hacer abandonar en nuestra idea de pasar el Fin de Año en una de las plazas más famosas del mundo :)

Nos dio tiempo a celebrar el Año Nuevo en España, en Portugal y, por supuesto, en la Costa Este de los Estados Unidos. Para amenizar la noche teníamos a Jeniffer López (el culo más caro del cine y la canción) actuando bajo la lluvia, no llegamos a ver el escenario, pero como Times Square está lleno de pantallas pudimos verla a través de la televisión (¿cuánto le habrán pagado por estar en Times Square en Fin de Año? Seguro que poco no)


En cuanto bajó la bola estalló la alegría colectiva de toda la gente que había estado pasando, al igual que nosotros, las horas y aguantando la lluvia, la nieve y el frío polar. Para celebrar el Año Nuevo tiraron confetis de todos los edificios (imagen muy americana por cierto) y nos pusieron por megafonía el “Imagine” de John Lennon y, como no, el “New York, New York” de Frank Sinatra (“The City that never sleeps”)...



Por fin podemos decir, Álvaro y yo, que hemos vivido un Fin de Año en Times Square... acabamos reventados, pero mereció la pena.


No tardamos ni 45 minutos en llegar andando al hotel, apagamos la luz y nos echamos a dormir como unos angelitos :)


Al día siguiente decidimos alargar un poco más la mañana y salir a eso de las 11:30am, nos quedaba todo un día de visita por Manhattan y una visita pendiente a Salvatore para contarle nuestra aventura por Washington y por Times Square.


Estuvimos dando vueltas por el SOHO, por el NOHO, por el barrio de TriBeCa, por la Zona Cero, por Wall Street, por el embarcadero del Ferry a Liberty Island, por Chinatown, por Little Italy, por el barrio de Chelsea y por la orilla del Hudson.



Al acabar volvimos a quedar con Salvatore: nos tomamos unas cervezas con él y charlamos de lo que habíamos hecho en estos días en los que no nos habíamos visto, nos enseñó el parque de Washington Square y su arco y nos recomendó un japonés para cenar... un japonés sublime, por cierto.


Se había acabado el primer día del año 2010... al día siguiente me esperaba el avión de vuelta a Denver y una mañana de relax por NYC

Al día siguiente quedamos con Inés y con Mercedes para despedirnos, estuvimos viendo el puente de Manhattan, nos fuimos a comer a un italiano que estaba cerca de la 5th Avenue, recogimos mis cosas del hotel y a las 5:00pm ya me estaba despidiendo de Álvaro antes de entrar en la zona de embarque.


Ahora le toca disfrutar en solitario a Álvaro de NYC estos dos días que le quedan y a mí me queda esperar a que venga Rosario a buscarme al aeropuerto de Denver y salir mañana hacia Santa Fe para poder dormir tranquilito en mi cama y volver a la vida rutinaria del trabajador... Lo cierto es que estar 16 días fuera de casa haciendo turismo es bastante agotador... aunque muy gratificante.


El viaje de avión fue muy tranquilo, tenía miedo de posibles retrasos por los fuertes vientos que decían que soplaban en la ciudad de NYC y por el frío polar que estuvo pegando fuerte durante todo el sábado pero al final sólo tuvimos un retraso de 40 minutos dentro del avión antes de que despegase probablemente debido al aire o algo así...


Finalmente llegué a Denver 20 minutos antes de la hora prevista, me vino a recoger Rosario para ir al hotel y al día siguiente salimos temprano de Denver para poder llegar a Santa Fe y organizar todo para empezar a trabajar al día siguiente...

Fin de las vacaciones más largas desde que he llegado a este país.


6 comentarios:

  1. La verdad que nos valió la pena el frío pasado en Times Sq, celebrar el cambio de año en uno de los centros neurálgicos del mundo es algo que debe hacerse una vez, al menos, en la vida :D.
    Lo que no sabemos es si la japonesa que teníamos al lado sobrevivó a la experiencia o pereció congelada.
    La semana que pasamos allá fue impresionante, no sólo por el cambio de año y demás, sino que me ha permitido vislumbrar algo más de la realidad estadounidense por experiencia propia y por lo todo lo que me contaste de todo lo que vives allá (como si el blog no fuera sufiente ;P).
    Los días que me quede solo me sirvieron para moverme on myn own en la gran ciudad, para pasear por sitios ya conocidos, conocer otros, grabar en mis retinas toda una serie de imágenes que no olvidaré en lo que me queda de existencia... y también me dio tiempo para pensar en volver a la carga, en volver a pedir la plaza y lograr vivir mi propia experiencia allá.
    Desde el viernes que salió la convocatoria estoy de nuevo en la brecha, con fuerza, con esperanza y con muchas, MUCHAS GANAS.
    Yo también disfruté muchísimo.
    Un abrazo.

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  2. Ha tenido que ser magnífico el estar ahí en ese momento. A ver si un año de estos...

    Un saludo y que sea leve la vuelta a las clases.

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  3. Lo cierto es que las 7 horas y media esperando de pie y aguantando lluvia, nieve, frío y el cansacio es más que una dura prueba...

    Eso sí, merece la pena aunque sólo sea por ver el ambiente y poder decir: "yo he estado en fin de año en Times Square"

    Creo yo que no volveré a repetir en mi vida un fin de año en Times Square (si estoy en NYC preferiré ir a ver las fiestas de Central Park, por ejemplo), pero desde luego que no nos arrepentimos de todo el tiempo que hemos pasado allí.

    Eso sí, la próxima vez que vuelva a NYC iré a Broadway con la 48 para recordar el momento :)

    Que haya suerte con la convocatoria de PV de este año... este año seguro que es el vuestro

    Un saúdo
    Roi

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  4. Vivir un fin de año en Times Square, que emocionante y ver de cerca ese Van Gogh, no tiene precio.

    Fabuloso, nosotros aun no hemos ido a NY, pronto caerá.

    un abrazo

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  5. Lo de Times Square es cierto que no tiene precio, bueno sí, pasarse ocho horas bajo el frío y la nieve... pero merece la pena el subidón de verse en un lugar tan impresionante rodeado de gente que ha sufrido las inclemencias igual que tú en el momento en el que empieza a bajar la bolita...
    Hay que aprovechar para hacer estas cosas, sólo se es joven una vez en la vida :)

    La Noche Estrellada no la vi yo, la vió Álvaro en los dos días que se quedó sólo en la Gran Ciudad, yo ya había estado en el MOMA y no fui a verla...

    NYC es una ciudad de paso obligatorio... seguro que os impresionará

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  6. LA Noche estrellada: Lo primero que vi en el MoMA y lo último que vi al salir... pufffff qué recuerdos de todo!.

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