domingo, 29 de noviembre de 2009

Santa Fe - Las Vegas - Los Ángeles (2ª Parte)



Después de despertar en East LA por la mañana temprano nos fuimos a los Universal Studios Hollywood. Un parque de atracciones que no es, ni de lejos, tan emocionante como los Universal Studios Portaventura en Salou - Barcelona, pero que lo que pierden en las atracciones lo ganan en que en Hollywood te enseñan los estudios donde se grabaron películas tan famosas como La Momia, Tiburón, Psicosis, Mujeres Desesperadas... lo que hace que no te importe mucho que no haya atracciones de esas que te hacen echar el corazón por la boca.



Este es un parque que está más pensado para fliparlo con la realidad virtual: nos montamos en un simulador de una montaña rusa en Krustyland (parque de atracciones de Los Simpsons), nos montamos en una montaña rusa que estaba totalmente a oscuras en La Momia (sospecho(amos) que estaba a oscuras para ocultar la pequeña sala en la que sucedía todo el recorrido), vimos espectáculos en 3D e incluso en 4D (¿cómo es eso de 4D? si queréis saberlo tendréis que venir a USA a comprobarlo vosotros mismos jajaja), vimos presentaciones acerca de efectos especiales, de cómo hacen trabajan con fuego real en ciertas escenas de películas y, lo que más “chido” estuvo a mi forma de ver, montamos en una atracción de agua en Jurasic Park... vamos, un día de lo más completito en cuanto a emociones se refiere.



Después del parque nos fuimos a disfrutar de la vista nocturna del Pier #4 de Santa Mónica. En este punto es donde tiene el final la Route 66, foto debajo del cartel y paseo nocturno por la playa de Santa Mónica, de paso aproveché para meter los pies por primera vez en mi vida en las aguas del Océano Pacífico... están bien estas experiencias ;)



En el propio Pier #4 nos fuimos a comer langosta a un restaurante que se llamaba The Lobster y que tenía unas vistas espectaculares de noria de luces que había en el propio embarcadero... Lo cierto es que la imagen de la noria toda iluminada sobre el embarcadero es una de esas imágenes que tenía en el trastero de mi memoria y que en cuanto la vi recordé perfectamente esa América que acaba en un embarcadero lleno de atracciones, sin duda alguna, un recuerdo que tardará en borrarse de mi memoria aunque no tenga ninguna foto impresionante para recordarlo.
Al día siguiente nos tocó recoger todo para poner rumbo a Santa Fe... pero la mañana aún podía dar mucho de sí, así que nos fuimos a dar una vuelta por Rodeo Drive (el Serrano de Madrid pero en versión reducida y con todas las grandes tiendas apretujadas), fuimos a dar una vuelta por la zona de Bel-Air, Melrose Place y después nos fuimos a disfrutar del soleado día a la playa de Venice Beach, más Pacífico para las retinas y más de poder disfrutar del increíble ambiente que se forma en el paseo marítimo de esta playa.


Después de Venice Beach... nos faltaba algo... ¿Qué tienes la obligación de hacer cuando vas a LA? La respuesta es clara: Ir a sacarse unas fotos al cartel de HOLLYWOOD! No vayáis a pensar que es fácil... el cartel es zona protegida (¿? estos americanos están locos) y las callejuelas desde las que se supone se podría sacar una foto decente acaban repentinamente en caminos privados a partir de los cuales no se puede seguir más que a pie y subiendo algún tipo de montículo... bueno, con todo, al final logramos subir a un cerro (puñetera cuesta) desde el que había una vista bastante buena tanto del cartel como del Downtown de LA.



Las cuentas que nos habíamos hecho eran para haber salido a las 4 o 5 de la tarde... pero nos dieron las 6 y aún estábamos a vueltas por las colinas de Hollywood y aún nos quedaba algo más por hacer: comer un burrito en LA (Juan Carlos se había encargado de ponernos las ganas) y así que bajamos de nuevo a Sunset Boulevard y nos pedimos un burrito, finalmente estábamos saliendo a las 7:30pm.



Estuvimos conduciendo y logramos llegar finalmente a Kingsman (el mismo pueblo en el que habíamos dormido la primera noche), pillamos el mismo motel que a la ida. A la mañana siguiente nos levantamos temprano y logramos llegar a Santa Fe a las 7:00pm. Una paliza de domingo... pero mereció la pena.

Si me tuviese que quedar con algo de todo el viaje: me quedaría con los paisajes que se disfrutan por la carretera (montañas, presas, desiertos, puestas de sol...), con las luces nocturnas de Las Vegas y con la agradable visión del Océano Pacífico desde la playa de Santa Mónica o la playa de Venice Beach.



El reloj empieza a descontar hacia las vacaciones de Navidad... ¡New York me espera!



Cómo no, la foto es del NY que se puede ver en Las Vegas jajaja

jueves, 26 de noviembre de 2009

Santa Fe - Las Vegas - Los Ángeles (1ª Parte)



Tras alquilar el coche el mismo martes y esperar a que pasasen las 4 largas horas desde que agarramos el coche hasta que sonó el timbre que anunciaba el inicio de nuestro viaje, nos montamos en el coche Juan Carlos, Marián, Rosario y yo. Por delante quedaban unas cuantas horas hasta llegar a un pueblecito llamado Kingsman y que está en el extremo oeste de Arizona.

La pena de este trayecto es que no pudimos ver los maravillosos paisajes que nos ocultaba la noche... suerte que a la vuelta pudimos admirarlos bajo la claridad del sol. Sólo un dato: la Route 66 pasa por esta misma carretera que llevábamos, la I-40, así que mi próximo viaje a través de la Ruta Madre será hacia Arizona para poder disfrutar de la cultura india y los paisajes que nos hemos ido dejando a un lado y a otro de la carretera por falta de tiempo.



Después de parar a dormir en Kingsman salimos hacia Las Vegas... El destino parecía que no nos quería dejar ver Las Vegas porque, mientras conducía Rosario, nos pusieron una multa por exceso de velocidad y cuando ya estábamos a punto de entrar en Las Vegas Boulevard, una escalera que estaba tirada en medio de la carretera se vino hacia nosotros y nos jodió el radiador del coche. Consecuencia: coche parado justo en la esquina de Las Vegas Boulevard con la salida del freeway y una horita y media de espera hasta que nos dieron otro coche los del seguro... Bueno, por lo menos la espera no fue exagerada y pudimos continuar nuestro viaje.


Llegada a Las Vegas. ¿Qué puedo contar? Lujo, cartón piedra por todas partes, grandiosidad, luces, tráfico, anuncios a destajo... y cuando cae la noche: INDESCRIPTIBLE. Me molestaría en describir alguna de todas esas sensaciones pero mi léxico no es lo suficientemente rico como para hacer una descripción acorde con todo lo que vi.


Cosas que me sorprendieron de Las Vegas: a parte de las infinitas y aburridas máquinas tragaperras, de las mesas de cartas, de las mesas para jugar a dados me gustó mucho poder dormir en el hotel Monte Carlo (hotel en el que está rodada la serie “Las Vegas” y de la que estuve enganchado unas cuantas temporadas), ver la ciudad en la que Grissom resuelve los asesinatos, dejarme sorprender por tooooodas las luces que emite esta ciudad, ver el fantástico espectáculo de sonido y agua que tiene el hotel Bellagio, poder beber alcohol por la calle sin tener que mirar si viene la policía, ver algo tan inverosímil como una tienda de M&M’s de cuatro plantas (¿para qué quieren los M&M’s cuatro plantas de tienda en la zona más cara de LV?), ver que hay sitios en USA en donde aún no han perdido totalmente la cabeza y dejan que los garitos abran hasta las tantas de la madrugada, comprobar que de un mismo aeropuerto (que está justo al lado de la calle principal de LV) salen y llegan aviones a razón de uno cada minuto, disfrutar de las vistas nocturnas de LV desde la planta 29 del hotel, ver en una misma calle la Estatua de la Libertad, La Torre Eiffel, La Esfinge de Gizeh, los Torres de San Marcos de Venecia, La Fontana de Trevi...

Lo que no me gustó de Las Vegas... ¿? Seguiré buscando entre mis recuerdos...

Estuvimos en Las Vegas todo el miércoles y el jueves hasta las tres, después decidimos tomar la carretera hasta Los Ángeles, carretera que atraviesa el desierto de Mojave... como no, impresionante (curiosa es la foto de un cartel que había por este desierto, el que sepa pronunciar lo que pone que me lo diga). Por cierto, como había un montón de árboles "Joshua Tree", como el disco de U2, decidimos parar a hacer unas fotos... con tantas horas de viajes te da tiempo a hacer muchas cosas raras ;)


Pero la sorpresa gorda aún estaba por llegar, después de atravesar Mojave y algún pueblecito después del desierto nos encontramos con las luces de LA. Mucho más de una hora después de atravesar ciudades y ciudades que dependen de LA Metro conseguimos llegar a East LA, zona de latinos por excelencia... aquello era como llegar a México, todos los carteles en español y alguno traducido al inglés :) Allí fue donde nos quedamos a dormir.



Por hoy ya llega de entrada... mañana más


domingo, 22 de noviembre de 2009

Visitantes en Santa Fe :)


El fin de semana tocó visita a Las Cruces... este fin de semana la visita fue devuelta y ahora Adri fue la que vino a visitarnos a Santa Fe. Comienza otro fin de semana de poco dormir...

El viernes en cuanto salgo del instituto tengo que ir a recoger a Adri a un lugar cercano a mi casa, primeras cervezas en casa, cena en casa de Juan Carlos y nos vamos a tomar unas cervecitas a un bar que hemos descubierto recientemente: El Matador. Cuando nos damos cuenta ya están llamando para el Last Call... es decir, son las dos de la mañana y si queremos seguir bebiendo cervezas lo que tenemos que hacer es irnos a casa. Bueno, pues nos vamos a casa a comer algo y a eso de las tres nos vamos a dormir con la idea de levantarnos algo temprano para ir a ver Chimayó y Taos.


Al día siguiente nos levantamos medianamente temprano y a las 10:30am ya estamos de camino hacia nuestro primer destino: Chimayó, un pueblo en el que hay un santuario. Es un sitio bastante chulo para visitar y una de las primeras cosas que llaman la atención es ver que prácticamente todos los carteles están escritos en español (muchos de ellos sin traducción al inglés) lo que da una idea de qué tipo de gente va sobre todo a esos santuarios.


Después de ver Chimayó atravesamos las montañas en dirección a Taos. Pasamos por unos pueblos muy chiquitos en los que aún había nieve acumulada desde la nevada del fin de semana anterior. De todos estos pueblos pasamos por uno muy chulo (simplemente era un pueblo de montaña más) que se llamaba Truchas. Atravesamos también un pueblo que debía de ser indio porque a la entrada del pueblo ponía que estaba prohibido sacar fotos, ya sabéis, los indios no quieren que les saquen fotos por si les robas el alma o algo así... Lo cierto es que no podíamos sacar fotos pero el pueblo tampoco tenía nada interesante que fotografiar.


Al final de la carretera de montaña entramos en Taos. Fuimos a comer a un sitio que se llamaba El Taoseño (buena comida, la verdad) y después fuimos a visitar el poblado indio (de esta vez llevé la cámara y, aunque no habíamos pagado los $5 para poder sacar fotos, nos dedicamos a sacar algunas fotos del lugar). Después de la reserva india fuimos hasta el Río Grande, vimos el Cañón del río desde Gorge Bridge y la verdad es que nos quedamos todos impresionados (bueno, Juan Carlos no tanto porque ya había estado en el mismo sitio años antes). Las fotos no muestran realmente la grandiosidad del lugar: tener delante de ti un cañón de no sabría decir cuántos pies de profundidad, y un poco más adelante ver unas montañas que tranquilamente llegarán a los 12,000 pies de altura es, definitivamente, fascinante... Una cosa hay clara, la Naturaleza tuvo que estudiar Arquitectura en una buena Universidad...


Después de la visita al cañón fuimos a dar una vuelta por Taos... por la noche es igual de chulo que por el día... mereció la pena dar una vuelta por el Downtown y por alguno de sus rinconcitos.



Regresamos a Santa Fe y fuimos directamente a ver un espectáculo de Cabaret en el Saint Michael's College. Era mi primer Cabaret y ciertamente estuvo muy bien... Llegamos 10 minutos tarde pero gracias a eso no tuvimos que pagar los $10 que costaba la entrada... no tenemos ni idea de dónde tendríamos que pagar pero el caso es que cuando entramos incluso vino un señor y nos buscó unos asientos en donde sentarnos... estos americanos son la leche!

Después del Cabaret nos fuimos a vaguear a casa de Juan Carlos y después a descansar hasta el día siguiente.

El domingo nos tocó enseñarle Santa Fe a Adriana: la visita standard, La Plaza, La Catedral, algunos patios curiosos, la Iglesia de Loreto, La Misión de Santa Fe, paseo por al lado del río, paseo por la Canyon Road y después de eso nos subimos a la montaña para disfrutar de la nieve de la estación de sky, que aún está cerrada, y de la naturaleza que no deja de impresionarnos siempre que subimos.


En cuanto se marchó Adri, sobre las 6 de la tarde, tocó hacer la colada de la semana y organizar algunas cosillas para el GRAN VIAJE de este martes...

Por favor que llegue el martes de una vez :)

domingo, 15 de noviembre de 2009

Las Cruces


Los fines de semana están para disfrutarlos... y este fin de semana me tocó ir a disfrutarlo a Las Cruces, en la frontera de New Mexico con Mexico.

El viaje hasta allí es de cuatro horas, 300 millas, pero sin duda alguna ha merecido la pena. En primer lugar porque ese viaje me hizo cumplir una de las promesas que había hecho en el curso de Getafe antes de venir a los States y es que le había dicho a Adriana, una muy buena amiga a la que ayudé a completar en tiempo récord los papeles necesarios para poder venir a New Mexico, “La próxima vez que nos veamos será al otro lado del Océano”, y por fin este fin de semana se ha cumplido la promesa, y lo mejor es que no acaba ahí la cosa, este fin de semana se va a pasar Adriana por aquí para acabar de cumplir el trato... Bueno, realmente el trato no estará acabado porque aún nos queda por ir a visitar a una compañera que se va a trabajar a Oregon, pero eso ya formará, cuando decidamos ir, parte de otra entrada.



Pues el viaje a Las Cruces empezó el viernes sobre las cinco de la tarde, llegada a Las Cruces a eso de las nueve de la noche y cervecita en un garito, con música en directo por supuesto, en Mesilla... qué mejor forma de llegar a un sitio que conociendo los bares locales ;)

Al día siguiente tocó madrugar porque Adriana fue a jugar un torneo de tenis a El Paso, Texas, y mientras yo aproveché para conocer todos los chalets de la falda de la montaña, el club de tenis al que iba a jugar estaba justo en medio de la tremenda urbanización, y después para conocer el resto de El Paso: el Downtown, la frontera con Ciudad Juárez, la Universidad...


Estaba a un paso de poder entrar a México pero toda la gente con la que había hablado me desaconsejaron cruzar la frontera por la inseguridad de Ciudad Juárez y, como aún me quedan muchos sitios que ver en USA antes de ser secuestrado en Juárez, decidí quedarme en territorio americano viendo los tremendos contrastes que hay entre las grandes mansiones que hay en la falda de la montaña y los edificios tristes de apartamentos que te encuentras en el borde con la frontera.


Cuando salió Adriana de jugar sus partidos, ganó el individual y perdió el de dobles, nos fuimos directos a ver el atardecer en White Sands, ya cerca de Las Cruces (bueno, cerca una polla porque queda a 45 minutos), y desde luego que, aunque sólo fuese por eso, merece la pena haberse metido una paliza de 8 horas de ida y vuelta... ¡qué preciosidad! ¡vaya atardecer! ¡qué grandioso es el blanco del desierto! ¡cuántas dunas! si es que hasta la carretera tomaba el color blanco... No sabría expresar la magnificencia del lugar ni aunque fuese filólogo :P

Después de White Sands tocó fiesta en casa de los vecinos de Adriana, otra cosa que me sorprendió y que tenía muchas ganas de probar, los vecinos, sin tener mucha relación contigo, llega un día y te dicen que te vayas a comer Gambo (una comida típica de Lousiana) porque han invitado a media urbanización y tú también entras en el lote, bueno, entraba en el lote Adriana y sus acompañantes, en este caso yo. Me encantó el Gambo y sobre todo la sensación de entrar en una casa ajena y servirte lo que te daba la gana, andar por donde querías y hablar la gente, que aunque no te conociesen de nada, siempre tenían algo que contarte... otra situación más con la que llenar la maleta de los recuerdos.



Para rematar la noche fuimos al cumpleaños de unos de los compañeros de trabajo de Adriana y estuvimos allí hasta la medianoche... este ya fue una fiesta más latina, entre otras cosas porque la mayoría eran sino españoles, hispanos, y las fiestas ya se asemejan más a lo que nosotros estamos acostumbrados... simplemente, una noche genial.


Al día siguiente nos tocó volver a El Paso para que Adriana ganase la final del torneo de individuales (¡enhorabuena Adri!) y después fuimos, después de tomar un Shake en el Dairy Queen (¿que no sabéis lo que es un Shake? ¿ni el Dairy Queen? en cuanto vengáis a USA os lo enseñaré de muy buena gana), a conocer lo que es el Downtown de Las Cruces, comer pescado en un mexicano y finalmente ir a visitar Mesilla, un pueblecito al lado de Las Cruces, que es un pueblo tradicional de New Mexico en el que tuvimos la suerte de ver una concentración de mariachis... me encantó poder ver y oír a los mariachis en acción. Para rematar la función, fuimos a ver los campos de picans de Las Cruces y con las mismas regresé a mi Santa Fe... como no, en el camino de ida volví a ser espectador de otra de las puestas de sol de este estado. Sé que ya lo he dicho un montón de veces pero lo volveré a decir: una de las cosas que más echaré de menos cuando me vaya de este estado es no poder disfrutar de las impresionantes puestas de sol...



Por cierto, después de un fin de semana de sol, un poquito de lluvia en Las Cruces y muy buenas temperaturas, al llegar a Santa Fe, la nieve estaba esperándome a la puerta de mi casa, la temperatura estaba por debajo de los 30ºF y al día siguiente me tocó rascar la luna de delante del coche para poder quitarle el hielo... Santa Fe parecía querer decirme: Wellcome Back! :)


martes, 10 de noviembre de 2009

Hablemos de Dinero



Uno de los temas tabú acaba siendo siempre el dinero que uno se ha gastado, que gana y del que dispone para vivir. Y sin embargo es uno de los temas que más pregunta la gente antes de lanzarse a probar con la aventura de los Profesores Visitantes.

Voy a intentar quitarme todos esos prejuicios que rodean a ese tema e intentar recordar todo el dinero que me he gastado y que he ganado en esta aventura.

A estas alturas de la película ya todos sabréis que me he presentado al programa de Profesores Visitantes por primera vez en el año 2009 y tuve la suerte de ser seleccionado para ser profesor de Matemáticas en el Estado de New Mexico (USA). La alegría de saber que vas a poder dar clases al otro lado del Océano compensa todo el dinero que poco a poco te vas dejando en el proceso:

Primera Fase: Convocatoria PPVV. Al echar los papeles de la convocatoria lo cierto es que no gastas mucho dinero, hay gente que dice que sí se ha gastado dinero haciendo traducciones juradas de sus títulos y mandando faxes y haciendo fotocopias, bien es cierto que tienes que hacer un montón de fotocopias de los títulos que alegas pero el dinero que se va en eso es más que asumible. Lo que sí quiero dejar claro es que NO hace falta ninguna traducción jurada ni nada que se le parezca a la hora de echar los papeles para solicitar el programa e insisto, el que os haga creer lo contrario es que miente, otra cosa será que una vez seleccionados para trabajar en USA el estado concreto lo exija.
En esta primera fase lo que sí hay que dedicar es tiempo a decidir el estado que más conviene, traducir los títulos con el inglés macarrónico que la mayoría de nosotros tiene, búsquedas en internet para hallar la mejor traducción de una palabra específica de alguna asignatura de la carrera, ¿cómo se traduce libre elección?, ¿cómo se dirá optativa? ¿y troncal? y obligatoria.. ¿se dirá “mandatory” o se dirá de otra forma? Dudas que a todos nos han surgido y que hemos gastado tiempo en preguntar a alguien que sabía más inglés que nosotros... Mi consejo, sé que no lo vais a seguir porque yo fui incapaz de hacerlo, “no os preocupéis, las traducciones las revisan gente experta que sabe que las traducciones presentadas no son perfectas”. Así que lo importante de todo esto es que “you tried to do your best”.

Segunda fase: Entrevistas en Madrid. Ahora sí que comienzan los gastos. Yo tuve la suerte de estar trabajando a sólo cien kilómetros de la capital así que para la entrevista fui con mi coche, yo y dos compañeros más (Álvaro y Adela), pillamos una habitación para los tres en una pensión no muy cara del centro de Madrid y al final de las entrevistas tomamos el camino de regreso. El total no lo recuerdo pero ahí no creo que se nos fuesen más de 60€ por cabeza, bueno el precio se subió un poco porque decidimos darnos el gusto de ir a un restaurante japonés algo caro. Repito, nos gastamos poco porque estábamos relativamente cerca de Madrid, en caso contrario el presupuesto se puede poner bastante más caro dependiendo de la distancia a la capital y dependiendo también del número de noches que uno se quede o tenga que quedar.

Tercera fase: Contratación en Estados Unidos. Una de las fases en las que más dinero te dejas... En cuanto te dicen que estás contratado entonces empieza el lío de verdad (podéis ver el papeleo en la siguiente entrada). Los gastos se empiezan a disparar y en esa fase se van fácilmente entre 400 y 500 € (lo cierto es que ahora mismo no podría asegurar la cantidad exacta pero más o menos anda por ahí: pago de diferentes tasas, infinitas llamadas para solucionar un montón de movidas, desplazamiento hasta una ciudad que ofrezca los servicios que necesites...). Ah! Se me olvidaba, como en USA el seguro médico es muy caro decidí contratarlo en España... 1000 € más para la engordar la cuenta.



Cuarta fase: Búsqueda de vivienda. Yo tuve la suerte de poder entrar en contacto con una profesora española que acababa el programa ese año y me dijo si quería alquilar la misma casa que ella estaba alquilando y también si quería quedarme con todas las cosas que había estado comprando para la casa. Acepté y ahí comenzaron los siguientes gastos. Llamadas a USA, menos mal que está el Skype, para hablar con el casero, pago de fianza de la casa y del primer mes ($1500), hablar con las compañías del gas y de la luz para cambiar los contratos, ponerlos a mi nombre y pagar las respectivas fianzas ($200). Indudablemente a todo esto hay que sumarle la comisión que te cobran los hijos de puta de los bancos para enviar dinero a USA y aún por encima convertir ese dinero de € a $... Entre todas las comisiones por las transferencias que he hecho mientras no tenía dinero en USA se me pudieron haber ido tranquilamente unos 150 €.



Quinta Fase: Vuelo a USA. Decidí volar desde mi Coruña natal hasta New York y allí echar una semana acostumbrándome al inglés y conociendo “La Ciudad que Nunca Duerme”. En total: 130 € del vuelo Coruña-Madrid, 30 € de la noche de hostal en Madrid, 440 € del vuelo de Madrid a New York, $1000 del hotel de Manhattan, $600 de visitas a museos, transportes, compras varias (entre ellas una cámara de fotos) y $230 del vuelo de New York a Albuquerque, el viaje de Albuquerque a Santa Fe fue gratis porque me llevó mi asesor en su coche.



Sexta Fase: Establecerse en Santa Fe. Como ya tenía casa amueblada y todo, mi llegada fue bastante relajada. No tuve que gastar más que el dinero de la comida para los primeros días y una bicicleta para tener un medio de transporte. En total, más o menos $200. Bueno, eso y los recibos de luz y agua del primer mes que ya me estaban esperando en el buzón (pero eso no fue prácticamente nada)

Séptima Fase: Papeleos en USA. Solicitar la licencia de profesor, solicitar el Social Security Number (esto es gratis pero me apetecía recordarlo), sacar el carnet de conducir de New Mexico, en total sobre unos $150.



Octava Fase: Comprar coche en USA. Al principio tenía intención de gastar unos $3000 en el coche, se encuentran fácilmente, pero se cruzó en mi camino la Troca que finalmente me compré y me gasté $5000 en comprarla, unos $150 en ponerla a mi nombre y comprarle la matrícula y $340 en asegurarla durante 6 meses. Indudablemente el dinero de la Troca lo tenía ahorrado en España, ni de coña habría podido juntar $5000 en los dos meses que estuve trabajando en USA.

Total gastos antes de cobrar el primer sueldo: 4000€ + $7500 (de estos gastos se pueden sacar los gastos de la estancia en New York y unos $3000 dólares de coche)

En el día a día las cosas están como siguen: en el trabajo cobro cada 15 días, mi sueldo actual es de $1100 a la quincena (el total bruto anual es de $35000), estoy cobrando como profesor de Nivel I porque, aunque tengo 3 años de experiencia reglada en España que me reconocieron cuando llegué a New Mexico, me expidieron la Licencia de Profesor mal y me pusieron en el Nivel I, al poco tiempo corrigieron su error y me reconocieron el Nivel II, en el instituto tuvieron que arreglar algunos papeles antes de empezar a pagarme mi Nivel II pero finalmente parece que lo van a hacer en el primer cheque de Noviembre... estoy expectante por saber cuanto cobro.



El sueldo lo distribuyo de la siguiente forma: el primer cheque lo suelo destinar a pagar la casa, las utilidades, la gasolina del coche y aún me llega para la compra de la mitad del mes. El segundo cheque es el que realmente va destinado a viajes, caprichos varios y alguna que otra compra de ropa.

La comida en Santa Fe suele suponer unos $150 al mes porque, aunque se dice que este estado es barato, lo cierto es que la comida está un poco cara a mi manera de ver.

Lo cierto es que todos los fines de semana intento tener algún tipo de plan que me mantenga activo y de esa forma olvidarme del stress de la vida del instituto. Algunos fines de semana me quedo en Santa Fe y me dedico a gastar “el dinero que me sobra” en ropa, comida, vida nocturna... Otros fines de semana planeo alguna escapada con el coche a los alrededores de Santa Fe (a la montaña, algún pueblecito cercano, a visitar algún casino...) El dinero va llegando, en mi caso, no tengo ninguna obligación en España y no tengo ninguna familia que mantener, con lo cual me permite darrme algunos lujos extra.

Resumiendo: el dinero es más que suficiente, es cierto que he perdido poder adquisitivo con respecto a España pero la experiencia de estar viviendo al otro lado del Atlántico, en un país en el que hay tantas cosas que ver, dando clase a unos chavales que tienen tanto que enseñarte y tanto que hacerte desesperar, merece la pena...

Desde aquí os recomiendo a todos que os animéis a la aventura... salvo que caigáis en un instituto infernal (el mío no es infernal pero poco le falta) llenaréis la maleta de vuestros recuerdos con experiencias inolvidables y situaciones que tardaréis mucho en olvidar.

¡Ánimo, valor... y al toro!



PD: En Santa Fe está conmigo una compañera, soltera, que está pagando hipoteca en España y también se puede permitir viajes y caprichos.

Actualización: Ya me están pagando el sueldo de un profesor de Level II, me han subido $7500 al año y eso me ha supuesto un aumento de $250 a la quincena después de aplicar las tasas correspondientes.