lunes, 28 de septiembre de 2009
Un Capricho como Otro Cualquiera
Los viernes los hizo Dios para tomar cañas antes de que el sábado entrase en escena...
Los sábados los hizo Dios para que pudiésemos descansar de nuestra semana laboral...
Hoy por la mañana me desperté a las 9:30am ¡qué alegría! No hay nada más reconfortante para el cuerpo que ver que es así de temprano y poder decir... qué le den al reloj, hoy no tengo prisa... Como había dicho en alguna otra entrada: “hay costumbres que son universales” y por lo que veo esta funciona tanto en España como en los States :)
Al final decidí levantarme a las once de la mañana con la intención de llamar a Sony y solucionar el problema que tenía con la cámara (se me había roto la pantalla). Me di el gustazo de llamar desde la cama... me atendió un chico hispano que me atendió muy bien y en 20 minutos ya tenía toda la información necesaria para poder mandar mi cámara a reparar, ni más ni menos que a Texas.
Ya tenía toda la información, sólo me faltaba mandar la cámara por correo así que, antes de que cerrase el USPS a la 1:00pm, fui a la oficina y mandé el paquete... Ahora me toca esperar a que me digan cuánto va a ser el precio de la reparación de la cámara (me temo lo peor)
Como el día estaba tan agradable decidí llamar a mis compañeros para que viniesen a comer a casa y después irnos a dar una vuelta por Santa Fe. Carmen estaba ocupada y sólo vino Juan Carlos, comimos y después nos fuimos hasta el Downtown a ver el mercadillo indio que se monta en La Plaza todos los fines de semana...
Aquí os dejo un video de La Plaza y de la Catedral para que os vayáis haciendo una idea de Santa Fe:
Estuvimos mirando alguna que otra tienda y vi una sombrerería. Como ya traía de España ganas de comprarme un sombrero me decidí a entrar: sombreros hechos a mano, de piel... Le pregunté a la chica por el precio de un sombrero cualquiera... ¿cuánto pensáis que costaba un sombrero? A mí se me quedaron los pies vueltos... de $725 para arriba :O ¡Vale! Vamos a otro lado...
Al final entré en otra tienda de artículos típicos de NM en la que también tenían sombreros, con precios más razonables, y, como ya tenía el gusanillo del sombrero, me compré uno... Ahora ya parezco un poco más americano jajaja
La verdad es que es un capricho como otro cualquiera, pero estoy bien contento con mi nueva compra...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Mientras que el que te la vendiera no fuera un sombrerero loco, y no hubiese ninguna niña rubia ue se mete dentro de un espejo... vamos bien.
ResponderEliminarNo sé a qué te refieres pero creo que de eso no había nada...
ResponderEliminarLo único que había era una chica de Chihuahua que sabía pronunciar, sorprendentemente, la "ch"... aunque eso también da un poquito de miedo jajaja